«El análisis sugiere que debe considerarse que no se cumple el criterio de deuda definido en el Tratado y, por tanto, está justificado un procedimiento de déficit excesivo basado en la deuda», ha informado el Ejecutivo comunitario en un comunicado.
Bruselas ha llegado a esta conclusión tras realizar una nueva evaluación de incumplimiento que era «necesaria» porque el plan presupuestario remitido por Roma par 2019 «supone una modificación significativa» de los factores que ya había analizado en el mes de mayo, cuando descartó la apertura del expediente.
El viceprimer ministro Matteo Salvini, ha hablado después de que Bruselas rechazara el presupuesto de Italia para 2019, y dijo «que los objetivos fiscales del gobierno eran válidos e indicó que no negociaría sobre ellos».
«Estamos convencidos de los números en nuestro presupuesto. Lo hablaremos dentro de un año», dijo a los periodistas.
El miércoles, el ejecutivo de la UE dio el primer paso para disciplinar a Italia sobre el presupuesto, respaldado por el euro zonego. Los temores de que los planes de compra y préstamo de Roma podrían desencadenar otra crisis de deuda que los perjudicaría a todos. Salvini dijo que cualquier sanción de la UE contra Roma sería «una falta de respeto» hacia los italianos.