«El éxito de Unfold se lo debo a Dulceida»

Alfonso Cobo tiene 26 años. Nació en Las Palmas de Gran Canaria pero ha vivido en Madrid, Londres y Nueva York, donde reside actualmente. Estudió arquitectura pero no ejerce. Y sus padres siempre le aconsejaron que se buscara un trabajo normal. Menos mal que no les hizo caso. Cobo es el CEO y cofundador de Unfold, una aplicación con tanto éxito que le ha llevado a ser elegido como uno de los jóvenes menores de 30 años más influyentes de EE.UU. en la categoría de innovación tecnológica por la revista «Forbes», el único español en esta categoría.

Dulceida, Selena Gómez o Camila Cabello son solo tres de los 13 millones de usuarios que utilizan Unfold para contar sus historias en las redes sociales. Se trata de una «app» para crear narrativas digitales con la ayuda de plantillas minimalistas para compartir «Stories» en Instagram, Facebook o Snapchat.

[Descárgate Unfold en iTunes o desde la Play Store]

Enhorabuena por ser uno de los jóvenes más influyentes de EE.UU. ¿Cómo fue ese momento en el que la revista «Forbes» se puso en contacto contigo?

Hace varias semana me llegó un email en el que me informaban de que estaban considerándome para ser uno de los elegidos. Me mandaron una serie de preguntas, a las que respondí sin creérmelo demasiado porque no pensé que me pudieran elegir de verdad. Unos días después, me llegó otro correo electrónico en el que me decían que tenía que acudir al evento que organizaron, pero yo no sabía si había sido elegido. Estaba nominado y cuando vi mi cara en Times Square proyectada no me lo creía. Había sido elegido.

Tu familia tampoco se lo creería ¿no?

(risas) Mi familia no entiende muy bien lo que hago. No son nada tecnológicos, ni siquiera conocen Instagram. Mi madre siempre me decía: «Alfonso, búscate un trabajo normal». Y yo le contestaba: «Mamá, cree en mí». Pero es que siempre he sido algo rebelde.

¿Por qué? Cuéntame qué has hecho hasta llegar hasta aquí

Empecé a estudiar arquitectura en España pero lo dejé y me fui a Brighton (Inglaterra) para estudiar la carrera. Estuve allí trabajando dos años de arquitecto pero no me apasionaba. Necesitaba expresar mi creatividad de otras maneras y en mi tiempo libre hacía diseño gráfico, páginas web… y durante este proceso descubrí el «Design Thinking», el diseño pensado en personas. Lo dejé todo y me fui a Nueva York a estudiar un máster, que he terminado este año, que me enseñara esos conceptos.

«Mi madre siempre me decía: ‘Alfonso, búscate un trabajo normal’. Y yo le contestaba: ‘Mamá, cree en mí’»

Y en ese contexto, ¿cómo y cuándo nace Unfold?

Durante mi último año de universidad, acudí a una feria de empleo . El problema es que se me olvidó diseñar mi portfolio con mis trabajos. Me puse a buscar alguna aplicación en mi iPad que me permitiera mostrar mi creatividad de una forma bonita y llamativa pero no encontré nada. Entonces, decidí que crearía una aplicación y me puse a ver vídeos en Youtube de cómo tenía que hacerlo.

Al cabo de unos meses, la creé para iPad, basada en revistas minimalistas, de las que soy muy fan. Y a la gente que conocía se la enseñaba y le gustaba mucho. Me dijeron que la tenía que crear también para iPhone. Justo Instagram había lanzando «Stories». Lanzamos Unfold en enero de 2018. En mayo, metimos cosas de pago.

¿Y ya está? Unfold no es una aplicación cualquiera. Ha revolucionado el mercado

Yo no pensé en el dinero que podía ganar ni nada. Todo fue fruto de mis pasiones: el diseño, la tecnología, las redes sociales y la fotografía. La «app» fue poco a poco creciendo, empecé a ver cómo la gente conectaba, la gente usaba Unfold para contar historias… Y así encontré a mi socio, Andy McCune (23 años).

¿Cómo fue la búsqueda de ese socio?

Realmente le encontré, no le buscaba. Contacté con él a través de Instagram porque yo intentaba contactar con «influencers» para venderles la aplicación. A Andy le gustó desde el principio, me empezó a preguntar por la estrategia, el modelo de negocio… Y casualmente los dos vivíamos en el mismo barrio de Brooklyn. Quedamos y le dije «¿Quieres formar parte de esto conmigo?». Él utilizó su influencia en redes y su experiencia en viralidad para que el producto creciera.

¿Y cómo llegó ese momento de éxito total de Unfold?

Al principio, pedíamos a los «bloggers» que usaran la «app» para mostrar sus viajes. Hasta que un día explotó. Y sucedió gracias a Dulceida, que empezó a usar Unfold en sus «Stories» de Instagram y empezó a recibir cientos de mensajes de sus seguidores preguntándole con qué aplicación creaba sus historias. Llevo tiempo queriendo hacer una colaboración con ella y quiero darle, desde aquí, las gracias, porque ella dio a conocer la «app» sin que nosotros se lo pidiéramos. Lo compartió sin nada a cambio. Sé lo que las marcas pagan por hacer colaboraciones con grandes «influencers». Nosotros nunca hemos pagado. Nuestro crecimiento ha sido orgánico.

¿Cuántas personas forman la empresa?

Somos 15 personas de entre 22 y 26 años. No tenemos oficina física. Todos trabajamos en remoto. Quiero que los empleados viajen, que conozcan gente y que vuelvan con historias que contar…. Historias que lleven a cabo un cambio social.

«Quiero darle, desde aquí, las gracias a Dulceida porque ella dio a conocer la «app» sin que nosotros se lo pidiéramos. Lo compartió sin nada a cambio»

¿Qué requisitos hay que reunir para trabajar con vosotros?

Es muy curioso cómo contrato a gente. Nada de enviarme el clásico currículo o de hacer una entrevista personal. Me llegan mensajes directos en Instagram todos los días de solicitudes y eso me gusta porque veo a gente interesante, que crea contenido. Por ejemplo, si un diseñador me contacta, le digo que diseñe alguna plantilla que le gustaría ver en la aplicación.

Pregunta obligada: ¿por qué no haber lanzado Unfold desde España?

En España no se valora tanto la creatividad, el arte o la cultura, factores fundamentales de Unfold aunque sea una aplicación tecnológica. Además, el sistema educativo español está basado en hincar codos, no en la creatividad, en arriesgar, en descubrir tus pasiones… En nuestro país, lo importante son solo las notas, mientras que los sistemas educativos de EE.UU. o Inglaterra valoran más los otros factores que he mencionado. La inteligencia no se basa en las notas que saques. Por eso creo que, en mi país, no habría estado tan motivado para emprender.

Has cosechado el éxito con Unfold pero esto no se puede quedar aquí. ¿Qué planes tenéis?

Nos hemos dado cuenta de que muchas marcas usan la aplicación así que hemos decidido coger una nueva dirección: Unfold para marcas. Hablamos de las firmas más grandes y prestigiosas del mundo, a las que les vamos a vender plantillas exclusivas para que puedan contar sus propias historias.

También seguiremos lanzando plantillas, nuevas funcionalides que nos demanda el usuario, que es quien dicta nuestro producto. Y muchas cosas más que de momento no puedo desvelar.